Inicio Foros General Una sugerencia para un nuevo NPC en la zona de Golthur.

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    • El ojo de Argos512
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      Buenas,

      En este post vengo a sugerir una idea para un NPC. Sé que es muy genérico, pero tal vez pueda ser inspiración para nuevas criaturas. Pero, primero, ante todo, como indica gnomentero en su post «Peticiones para 2023», ante todo, reparar los errores existentes y pulirlo todo, de lo contrario esta casa se caerá a trozos. No se construyeron las mejores catedrales con pilares defectuosos.

      Indicado lo anterior, prosigo con mi idea:

      (Disculpas por adelantado por la ortografía. Después de todo solo es un borrador).

      Salón de los cortes (o)

      Castrador supremo de La Horda Negra.

      Descripción mirar (sala)

      Salón de los cortes

      Te encuentras en una enorme estancia circular, de unos 200 metros de diámetro, repleta de rocas oscuras y grises. Un pentágono conformado por cinco antorchas azules de fuego fátuo, tenuemente brillantes, dotan a este lugar de su característico fulgor cian, mágico, frío como el hielo. Las paredes poseen huecos entre los que esconderse. Parece que a quien vive aquí le gusta camuflarse entre la penumbra. Hablando de lugares negros, parece que quien habita este antro tiene un especial gusto por los cuartos oscuros y los miembros viriles de sus víctimas, puesto que la tierra que pisas es un amasijo de cadáveres en diferente estado de descomposición, algunos, incluso disecados, tintados con el azulado y rojo de la sangre seca que todo lo inhunda. Un líquido lechoso y blanco cuelga de las paredes, y sobre ellas, pendiendo del techo por cadenas de mithril, docenas, cientos, miles de pechos amputados y penes erectos, cuelgan junto a sus testículos hermanos, arrancados de la entrepierna de los dueños quienes, una vez fuera de combate, permanecen días atados, observando el fatal destino que les espera, mientras ven a sus compañeros siendo mutilados, perdiendo sus tímpanos por culpa de los gritos del dolor ajeno. De hecho, en este preciso instante, logras dislumbrar hombres y mujeres enteros, quienes con ojos llorosos reclaman tu favor, ya sea liberándolos o matándolos de una vez. Tanto les da una cosa o la otra en su estado deplorable, sucio, hediondo, maloliente, despojados de toda esperanza y arrepintiéndose de no haberse quedado junto a los orcos que tanto les querían… En su menú. ¿Ves la pequeña apertura del techo puntiagudo? ¿Y el brillante líquido verdoso que, lentamente, se precipita hacia el centro de la circunferencia que es la sala? No es que te de buena espina precisamente. Lo mejor será no permanecer en este lugar más tiempo del necesario.

      Hacia el oeste observas tu penosa salvación, un túnel idéntico a la cueva que ves, aunque por suerte, el espectáculo es mucho menos macabro, no obstante, también hay huecos en las paredes del mismo, así que tal vez te estén esperando si sales donde, por cierto, a penas hay luz que atestigüe tu final.

      Puedes ver una salida. Oeste.

      Castrador supremo de La Horda Negra está aquí.

      Descripción mirar castrador

      ¿A caso pensabas que se cometían atrocidades en la cámara de tortura de Golthur Orod? ¿A caso te atreves a blasfemar contra la angelical bondad de los Uruk ai? No. Los verdugos de la fortaleza citada son bastante benevolentes (nótese la ironía). Lo que realmente deben temer los infelices es compartir celda con esta aberración.

      Este horrible ser gelatinoso imita la formidable figura de un humano mozo de cuadras, gigantón, musculoso, de constitución recia, rostro pálido y enfermizo de ojos verdosos y brillantes como el fuego, cuya  altura de tres metros y medio poco tiene que envidiar a la de los trolls. Cuando así lo desea, puede transformarse en un charco verdoso y viscoso, que se moverá ágilmente entre los espacios de penumbra del lugar, si se siente amenazado. De este modo acecha a sus víctimas, hiriéndolos y agotándolos con su puñal espectral mientras caminan, temerosos, hacia el final de este corredor de la muerte. Seguro que te lo has encontrado de camino y que, por ello, te sientes más debilitado. No por nada recibe su segundo nombre de morador verde. Ama a los hombres, como puedes ver en las paredes, aunque tampoco es que vaya a quejarse si la compañía femenina acude imprudentemente a su morada. Encuentra especialmente excitante las prácticas de la Horda Negra, hasta el punto de llevarlas a extremos inconcebibles, incluso para los propios orcos. Su condición física, así como sus admirables conocimientos de hechicería, lo hacen especialmente peligroso, a la vez que inmune a cualquier daño físico. Al culminar con su trabajo hacia los vivos, una guadaña de obsidiana, unas tijeras, una lima y algo de imaginación son lo único que requiere este monstruo para obrar los magníficos milagros que penden del inhóspito techo y que has contemplado con absoluto terror, asombro o impasividad, dependiendo de cuál sea la materia que conforma tu corazón. EL goce que el Castrador experimenta al escuchar la agonía de sus efímeros concubinos al ejecutar su fantástica cirugía sobre ellos tan solo es comparable con el que… Bueno, olvidémoslo. No hay nada que pueda equiparársele.

      No te emociones en demasía, ahogando tu cerebro en delirios de grandeza. NO serás un héroe o heroína si lo matas. Hay muchos como él esperando a ocupar el puesto de su antecesor. ¿No ves el nido del que salen estas cosas? No te preocupes. Ellos tampoco. El caso es que, tarde o temprano, surgirán nuevos especímenes como este. Sin embargo, tal vez consigas rescatar a algunos supervivientes si logras acabar con la vida de esta inmundicia. No obstante, antes de celebrar tu victoria con los amigos y los reclusos liberados, es recomendable que mires el techo, pues algo verde cae de él lenta e inexorablemente. No tardéis mucho en huir si no queréis perecer… Aunque primero hay que librarse de este ser, ¿no? No hagamos la tortilla sin disponer primero de los imprescindibles huevos. Paciencia. Hay mucho tiempo para vivir, y solo hace falta un poco de negligencia para echarlo todo a perder.

       

      ***Propiedades especiales propuestas****

      **Sugiero esta criatura como un ser que de tesoros de nivel 10. De este modo, las características de vida, constitución, fuerza, ofensivo y demás, obviamente deben ser muy poderosas. Además, este ser debe ser capaz de esconderse (exceptuando en esta sala, o tal vez no, vuestra es la decisión), moverse e incluso sigilar, alcanzando a los incautos con una maniobra de apuñalar cuando estos se encuentren en los pasillos. El apuñalar de esta criatura podría reducir la vida de los afectados en 1.500 puntos o más. Además, no hay problema alguno en que disponga de las habilidades golpecertero, ataquedoble, estocada, tajar, esgrimir o algunas más que consideréis de soldado. ALgún hechizo poderoso, de tipo arcano, tampoco le sentaría mal y, por qué no, en esta sala, el líquido verdoso que generará un nuevo ser por el reset, puede curar también a esta criatura. Al ser encontrado este ser mediante la habilidad buscar o al ser sorprendido en su escondite, este PNJ podría volver a su sala y permanecer ahí unos cuantos segundos (durante todo el bloqueo de la habilidad apuñalar, por ejemplo (unos 10 segundos, aunque no conozco bien este tiempo de lock), antes de volver a la carga. Como indico en la descripción, el daño físico no le afectará de ninguna manera. Tan solo en encantamiento, el fuego o la tierra tienen algo que hacer aquí. Para mayor emoción, podéis hacer que los daños eléctricos, si bien le reduzcan la vida, aumenten su poder de daño y su bono ofensivo durante un tiempo, por alguna reacción que consideréis adecuada. Sería algo poco visto en este juego. Sed libres de otorgarle a esta aberración la dureza que consideréis, aunque tampoco seáis *demasiado malos y no le incluyáis el ver realmente. Si no los sigiladores poco podremos hacer aquí… AUnque realmente no viviremos mucho si venimos a enfrentarlo solos. Un buen equipo para venir, podrían ser un cazador, un soldado, un mago (ah por cierto, los hechizos de la esfera adivinación no afectan a esta criatura. Así todos empatados) y un curador, todos de nivel 60 o superior. Sed libres de decidir, pero aquí va una idea.***

      Para el sistema de diplomacias, esta criatura podría regirse por las normas propias de La Horda Negra, o tal vez no, puesto que algunos integrantes de la misma se cuestionan hasta la propia existencia de la criatura. Al fin y al cabo, les roba entretenimiento a algunos de los orcos, aunque otros son los que envían a los cautivos escogidos a la dolorosa muerte que les propinará este ser. Tal vez podría el caudillo del momento elegir si este ser puede ser atacado por los aliados de La Horda Negra, o si, por lo contrario, deben mantenerse al margen.

       

       

      AHora bien. ¿cómo llegar a él? Se me ocurren varias ideas, aunque bastante genéricas. Por ejemplo, que todos los orcos de las cámaras de tortura dispusieran de un plano hacia el salón del corte. Soltarían este ítem con una probabilidad del 10%. Este plano podría contener un path oculto que, al ejecutarlo, te llevaría a una sala en la que hubiese que realizar una acción, solo posible con el plano empuñado o en el inventario. Por ejemplo, retirar las ramas de un montón del bosque Valdío que dejen una entrada libre, quitar piedras…

      Una vez hecho esto, la entrada podría conducir, lentamente, cada vez más abajo, hacia las profundidades de la tierra, siguiendo un laberinto de túneles excavados. No pasaría nada extraño primero. Insectos, lugar maloliente…. Algún gas que te quite algo de vida, como 300 puntos por ejemplo. Más abajo podría haber un acercamiento al volcán de la zona. La intensa actividad térmica del lugar podría provocar que, de vez en cuando, saltasen chorros de agua ardiendo que quitasen unos 500 puntos de vida de tipo fuego o agua, según se vea. Nada mejor para poner a los presos a tono para su destino final. Y luego vendría el laberinto del castrador, donde este podría seguir, sigilar, esconderse y apuñalar a sus víctimas. Un largo recorrido, al que podemos ponerle alguna trampa si se quiere, y finalmente, el salón. Ah por cierto. Algunos restos así que decoren las paredes cercanas a la morada del castrador no estarían mal.

      Tras esta larga exposición, me despido por ahora.

      Carpe diem.

       

       

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