Inicio Foros Historias y aportes Encargos para el Ala Plateada

Mostrando 4 respuestas a los debates
  • Autor
    Respuestas
    • Athewin
      Participante
      Número de entradas: 528

      Leethel. I.

      Librería y Tienda de Antigüedades.
      Cartel.

      La puerta sur se abre.

      Leethel llega desde sur.

      Leethel te hace una reverencia.

      Ghagkrik se encuentra girada de espalda ordenando algunos papeles.

      Un semi-elfo garraspea, intentando llamar la atencion de Ghagkrik.

      Ghagkrik se gira rapidamente.

      Leethel exclama en adurn: Hola!

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Saludos, vaya vaya tenemos visita.

      Leethel dice en adurn: Vengo buscando a Ghagkrik.

      Ghagkrik sonríe y se mira de arriba abajo.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: La tienes ante tí.
      Ghagkrik pregunta con una voz sobrenatural: ¿Que trae a un joven y apuesto semi-elfo como tú por aquí?

      Leethel dice en adurn: Llegaron a mis oidos rumores…
      Leethel dice en adurn: Realizas encargos a jovenes aventureros, a cambio de alguna recompensa.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Te habrás enterado mal, los que realizan encargos para mí son esos jovenes aventureros.
      Ghagkrik mira de arriba a abajo al semi-elfo.

      Leethel dice en adurn: Bueno, solo me interesó la parte en la que pagas algunas monedas.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Pero no sé si alguien como tú valdrá para eso.

      Leethel se mira en busca del porqué no podría valer.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Pareces que acabas de salir de una mala noche en la taberna de Tomeo…

      Leethel sonrie.
      Leethel dice en adurn: Cierto es que no es mi mejor dia.
      Leethel dice en adurn: Y sí llevo tiempo sin poder darme un buen baño caliente y comer algo en una taberna.

      Ghagkrik hace un movimiento de aleteo sobre su nariz.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: De eso ya me he dado cuenta…

      Leethel se encoje de hombros, sin saber que decir.

      Ghagkrik ojea varios papeles que tiene en la gran mesa que tiene como mostrador.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Dejame ver si puedes hacer algo…

      Una enorme sonrisa se dibuja en la cara del semi-elfo.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Compañía para una noche para Madame Solistise… no… descartado…

      Leethel mira con desespero su bolsa vacia de monedas mientras espera impaciente a Ghagkrik.

      Ghagkrik sigue ojeando los papeles que hay en su mostrador con algo de tranquilidad.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Mira… aquí hay algo para alguien como tú… y más con ese pestazo que desprendes…

      Leethel se sonroja a la espera de recibir el encargo.
      Leethel exclama en adurn: Si, dígame!

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Los alcantarillados de Alandaen huelen que apestan ultimamente, parece que en las desembocaduras de la barriada norte debe haberse producido un atasco considerable…

      Leethel dice en adurn: Ok, desembocaduras de la barriada norte.
      Repite el semi-elfo para que nose le olvide.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Seguramente alguien de la plaza central del pueblo pueda indicarte como entrar en ellas.

      Leethel dice en adurn: Entiendo.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Cuando termines el trabajo vuelve y hablaremos de negocios de verdad…
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Y no se te ocurra mentirme… si has conocido de mi sabrás que tengo oidos en todas partes, si la situación allí sigue igual no solo tendremos un par de palabras…

      Leethel habla entredientes sin que Ghagkrik pueda escuchar con claridad lo que dice.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Seguramente en la taberna de Tomeo puedas darte una ducha cuando termines la tarea.

      Leethel pregunta en adurn: ¿Ah, si?

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Es el más deseoso de que esto se arregle para que su negocio no caiga en picado.

      Leethel pregunta en adurn: ¿Y con que dinero podria pagarle?
      Leethel muestra su bolsa de monedas a Ghagkrik.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: No hará falta si terminas el trabajo.

      Leethel exclama en adurn: Como una patena! Quedarán limpias y relucientes! Como nueva!

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Ve con algo más que una pala porque allí abajo hay de todo menos agua…

      Leethel dice en adurn: Entiendo…
      Leethel pierde su mirada en el infinito, intentando visualizar lo que le espera allí abajo.

      Ghagkrik arranca una hoja de su libro y se la da a Leethel.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Toma este es el encargo… buena suerte.

      Leethel abandona el lugar despues de hacer una torpe reverencia.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Seguro que a este se lo comen las criaturas que viven allí…
      Ghagkrik se gira y continúa trabajando en lo que estaba haciendo antes de que el joven la interrumpiera.

    • Vyrleth
      Participante
      Número de entradas: 50

      Desatascando Alandaen.

      Apenas el sol daba comienzo a un nuevo día, ahí estaba Leethel, en el centro de la plaza de Alandaen buscando quien pudiese ayudarle.

      Dos guardias regresaban de realizar su ronda, cuando el semi-elfo decidió interrumpirlos.

      Leethel: Hola, buenos días.

      Uno de los guardias se giró hacia el semi-elfo, y con un gesto de aprobación le daba paso a hablarle.

      Leethel: Estoy en la ciudad para llevar a cabo un encargo que me encomendaron.

      Guardia: ¿Un encargo? ¿Qué encargo?

      Buscaba Leethel algo nervioso entre sus pertenencias el manuscrito que le había dado Gahgkrik donde estaba redactado el encargo.

      Leethel: Vengo desde Anduar, y necesito llegar a la parte norte de los alcantarillados, para desatascarlos.

      Mientras hablaba, Leethel le hacía llegar el papel al guardia.

      Con más escrúpulos que otra cosa, este lo cogió y después de mirarlo por encima lo devolvió bruscamente al semi-elfo.

      Guardia: ¿Y dices que aún no has desatascado el alcantarillado?, porque por tu olor, juraría que vienes del fondo de las mismas letrinas de la ciudad.

      Leethel levantaba uno de sus brazos y olisqueaba bajo su sobaco.

      Leethel susurrando: Pues no me da ami tan mal olor…

      Guardia: ¿Y tan solo esas son tus herramientas para tal encargo?, preguntó el guardia señalando el vacío petate del semi-elfo y una pala que cargaba a su espalda.

      Leethel: Así es, con esta pala, y estas manos me será suficiente.

      Después de soltar una sonora carcajada, el guardia se dispuso a mostrarle la entrada más cercana a la desembocadura norte de las alcantarillas.

      Guardia: Pues bien, hemos llegado.

      El guardia levantó una cuadrada trampilla del suelo, y le dio indicaciones de como llegar al punto atascado.

      Después de pegar un pequeño salto el semi-elfo se introdujo por el agujero, salpicándose de un espeso y apestoso líquido que le llegaba casi hasta la cintura.

      Así que esto es lo que tenemos aquí, decía Leethel mientras andaba lenta y pesadamente por aquel lodazal.

      Abriéndose paso entre numerosos roedores y un sin fin de alimañas que no lograba casi a vislumbrar por la oscuridad del lugar, pudo llegar a la desembocadura.

      Ante el semi-elfo se encontraba una redonda desembocadura de las cloacas de unos 2 metros de diámetro, y unos barrotes verticales la atravesaban.

      Después de varias horas de duro trabajo apartando todo tipo de innombrables asquerosidades, pudo liberar el paso de las alcantarillas, y en estas empezaban a fluir con normalidad las aguas residuales.

      Extenuado y casi sin aliento pudo salir Leethel de las alcantarillas, y se dirigió a la taberna donde le prometieron un buen baño y algo de comida después del duro trabajo.

    • Athewin
      Participante
      Número de entradas: 528

      Rogruk. I.

      Librería y Tienda de Antigüedades.
      Cartel.

      La puerta sur se abre.

      Rogruk llega desde el sur.

      Ghagkrik recoge algunos papeles que tenía sobre la mesa.

      Rogruk examina con un vistazo rápido el lugar, hasta posar la mirada en la arpía

      Ghagkrik pregunta con una voz sobrenatural: Propicios días, ¿qué trae por aquí a uno de los lacayos del general?

      Rogruk dice: Buenos días
      Rogruk dice: Y… propicios. Y prósperos, espero.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: No lo sé… depende de lo que vengas…

      Rogruk se aclara la garganta.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Espero que alguno de los vecinos no se haya quejado a la guardia por alguna otra estupidez.

      Rogruk dice: Es bien conocida mi labor aquí en Anduar, pero no vengo de parte de la Guardia hoy
      Rogruk dice: Vengo por el anuncio.

      Ghagkrik pregunta con una voz sobrenatural: Oh, ¿ha visto el anuncio de nuestra nueva adquisición?
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Es una silla tallada en madera de la primera Era.

      Rogruk saca un papel arrugado de algún sitio de su mochila. Al parecer ha sido arrancado de una forma bastante torpe.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Fue encontrada en las ruinas de Bhenin, está intacta…

      Rogruk dice: Sí, eso parece. Una silla espléndida, según pone aquí…

      Ghagkrik se dirige a la trastienda y con algo de esfuerzo y cuidado consigue sacar la silla a la zona principal.

      Rogruk mira confuso el papel

      Ghagkrik mira el papel y ríe.

      Rogruk dice: Pero no es para adquirir una silla por lo que estoy aquí.
      Rogruk señala la parte de abajo del panfleto.

      Ghagkrik suelta una carcajada aún más grande.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: El encargo que está señalando se llevó a cabo hace unos días.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Me hizo llegar esta fabulosa mercancía, pensaba que un guardia de anduar sabría la antigüedad de los carteles del tablón principal de la ciudad.

      Rogruk pregunta: Oh… Vaya. Es una lástima, porque precisamente represento a los Ashkar. ¿Ha oído hablar de nosotros?

      Ghagkrik sigue carcajeando mientras vuelve a llevar la silla a su sitio.
      Ghagkrik pregunta con una voz sobrenatural: ¿Los Ashkar? No, no me suenan, ¿debería?
      Ghagkrik vuelve a su escritorio y comienza a revisar facturas.

      Rogruk dice: Somos una compañía mercenaria especializada y perfectamente contratable
      Rogruk dice: Es de reciente creación… La gestionamos mi hermano y yo.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Eso lo dirás tú, no tengo ningún conocimiento sobre vosotros y te puedo asegurar que si algo no me falta es conocimientos y rumores…
      Ghagkrik abre un cajón de su mesa y saca un papel que empieza a leer relajadamente.
      Ghagkrik pregunta con una voz sobrenatural: ¿Y en qué se supone que estáis especializados?

      Rogruk dice: Estamos empezando. Queremos hacernos un nombre. Por eso pensé que… hum… pensé…

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Empezamos mal si ni tú sabes cual es vuestra especialidad.

      Rogruk piensa con cuidado para no hacerse daño.
      Rogruk dice: Pues somos mercenarios. Vendemos servicios a quien lo requiera. Travesías en barco, clases de idiomas, ehm… También rescatamos tesoros del fondo del mar… Uhm…

      Ghagkrik vuelve a echar un ojo al papel que acaba de sacar del cajón.

      Rogruk parece bloqueado por la falta de experiencia en el negocio.
      Rogruk dice: Había pensado hacernos un nombre y vi el anuncio…

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Mira tengo aquí algo que quizás pueda interesaros y a lo mejor comenzar a haceros un ‘nombre’…

      Rogruk dice: Precisamente… Le escucho
      Rogruk mira a Ghagkrik.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Hay un pescador en Alandaen, no sé ni cuánto dinero os pagará por esto ya que creo que lo ha gastado todo para pagar mis servicios…
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: El caso es que ha estado intentando promover su negocio de pesca pero con un simple bote no puede alejarse demasiado de la costa.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Dice…
      Ghagkrik carcajea desmesuradamente.

      Rogruk sonríe al escuchar la palabra dinero.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Dice que conoce una localización en alta mar con una gran cantidad de peces, que con un buen barco podría conseguir una buena cantidad de dinero y comenzar a crecer.

      Rogruk asiente con interés a las palabras de la arpía.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Quizás podáis ayudarlo, a mi ya me ha pagado por anunciarlo, si podéis conseguir algo podéis quedaroslo no me interesan las migajas de un mísero pescador.

      Rogruk dice: Necesitaré algún dato del contacto.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Por supuesto… por quién me tomas.
      Ghagkrik entrega a Rogruk el papel del anuncio.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: En ella tienes lo suficiente para encontrarlo.

      Rogruk desvía rápidamente la mirada de la arpía, avergonzado.
      Rogruk mira el anuncio con interés.
      Rogruk dice: Es verdad… Pero no lo entiendo.
      Rogruk se encoge de hombros.

      Ghagkrik pregunta con una voz sobrenatural: ¿es qué no sabes leer?

      Rogruk dice: Sé leer, pero no es eso.

      Ghagkrik dice entredientes: Menudo ineptos que tiene el general bajo su mando…

      Rogruk dice: El encargo… Entiendo que el cliente ha recurrido a usted como intermediaria.
      Rogruk suspira cuando parece comprenderlo todo.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Así es. Yo cobro por los servicios de propagación de los anuncios.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Y de vez en cuando me llevo alguna comisión u obsequio de lo conseguido por los que aceptan dichos encargos.

      Rogruk dice: Muy bien. Me ha cotado, pero lo he entendido.
      Rogruk carraspea.
      Rogruk dice: Costado. Perdona mi lenguaje. Los nervios…

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Como comprenderás no voy a dar encargos de mayor magnitud a una «compañía» de mercenarios de dos personas y que no conoce nadie en la ciudad.

      Rogruk dice: Los Ashkar cumpliremos su encargo. Ya verá usted cómo somos efectivos y podrá confiar en nosotros.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Si… si… seguro que si…
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Lo que dicen todos.

      Rogruk se ríe.
      Rogruk para de reír al comprender que la arpía no bromea.

      Ghagkrik mira de reojo a Rogruk.

      Rogruk mira a Ghagkrik.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: ¿Necesitas algo más? Mira qué aún me pagas la silla…

      Rogruk dice: No. Voy a cumplir el encargo. Y volveré para hacer de los Ashkar un nombre.
      Rogruk mira a la arpía con solemnidad.

      Ghagkrik levanta su alado brazo en forma de despedida.

      Rogruk dice: Ahora si me disculpa, he de ir a mi querida Alandaen.
      Rogruk se despide de ti.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Adiós… adiós…

      Rogruk dice: Pase usted buen día.

      -|Rogruk|/- se va hacia sur.

    • Athewin
      Participante
      Número de entradas: 528

      Leethel. II.

      Librería y Tienda de Antigüedades.
      Cartel.

      La puerta sur se abre.

      Leethel llega desde el sur.

      Ghagkrik se gira para ver al cliente que acaba de entrar en el local.

      Leethel mira hacia las paredes buscando algo de su atención mientras se acerca a Ghagkrik.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Oh vaya, mira a quién tenemos aquí al gran desatascador de alcantarillas.
      Ghagkrik muestra una ligera y sensual sonrisa.

      Leethel se sonroja.
      Leethel exclama en adurn: ¡Saludos!
      Leethel observa la nariz de Ghagkrik, deseoso de que este le olfatee.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: ¿Qué tal fue con Tomeo? Supongo que cumplió con su parte.

      Leethel exclama en adurn: ¡Menudo festín me preparó!

      Ghagkrik sonríe pausadamente.

      Leethel dice en adurn: Y un increíble y espumoso baño caliente.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Sí eso ya lo he notado desde que has entrado, ya no hueles a ciénaga repleta de verdina y peces muertos.

      Leethel dice en adurn: La verdad, no recordaba desde cuándo no me daba un baño así.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Es bueno para este negocio tener una apariencia respetable…

      Leethel asiente con la cabeza, con evidentes signos de no entender todo lo que Ghagkrik dice.

      Ghagkrik pregunta con una voz sobrenatural: ¿Me traes algo de parte de Tomeo o simplemente vienes a que te vea limpio?

      Leethel exclama en adurn: Ah, ¡Sí!
      Leethel saca de su petate una hoja doblada a la mitad.
      Leethel alarga su mano con la nota a Ghagkrik.
      Leethel dice en adurn: Me entregó esto para tí.

      Ghagkrik coge la hoja, la abre tranquilamente y le echa un vistazo.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Maldita sean esos rufianes…

      Leethel pregunta en adurn: Ru…¿Rufianes?

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Olvida lo que he dicho.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Bueno… al menos traes algunas noticias aunque no sean buenas.

      Leethel asiente con la cabeza.

      Ghagkrik pregunta con una voz sobrenatural: Cuando te fuiste uno de mis contactos me comentó que eras diestro con los animales, se te daba bien tratar con ellos. ¿Estoy en lo cierto?

      Leethel sonríe mientras eleva orgulloso la mirada hacia Ghagkrik.
      Leethel dice en adurn: Así es.

      Ghagkrik abre su segundo cajón y tras unos segundos rebuscando en él saca una pequeña carta.

      Leethel espera impaciente a que Ghagkrik hable.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: No sé si sabrás pero ese desdichado de Azarov manda a jóvenes a los bosques de Eloras a matar las arañas gigantes que pueblan aquel lugar.

      Leethel niega con la cabeza con semblante triste.
      Leethel dice en adurn: Pues no lo sabía.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Bueno… Más información para tí.

      Leethel se encoge de hombros.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: El caso es que esto no es suficiente, contactos cercanos al pueblucho me han comentado que en lo profundo del bosque mora una araña o criatura de dimensiones más grandes aún.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Se han visto cadáveres de varias vacas y ciervos totalmente destrozados por la zona noroeste del bosque.

      Leethel dice en adurn: Entiendo.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: En este caso no debes encontrar a nadie, esto es algo que quedará entre nosotros dos.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Ni siquiera deberías arriesgar tu vida, simplemente ve allí y busca a la criatura. Aunque si puedes acabar con su vida o convencerla de que se vaya tendremos aún más beneficios.

      Leethel dice en adurn: Convencerla Ghagkrik dice…

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Tú sabrás, que eres el que tiene buen tacto con los animales.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Si fuera por mí quemaría el bosque hasta que saliera…

      Leethel dice en adurn: Podría, pero solo sería temporal.
      Leethel exclama en adurn: ¡Incluso podría traerla aquí con vida!

      Ghagkrik sonríe mientras vuelve a poner la carta en el cajón de donde la había cogido.

      Leethel dice en adurn: Aunque me costaría menos esfuerzo acabar con ella, supongo.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Tú sabrás lo que hacer, si me traes información tendremos unos beneficios, si acabas con la criatura otros y si la traes viva quizás podamos sacar algo por ella.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: En cualquier caso gano dinero.

      Leethel pregunta en adurn: Entiendo… ¿Y cómo ganaría yo más dinero?

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Si acabas con ella, consigue que se marche de la zona o la traes aquí con vida.
      Ghagkrik medita durante unos segundos.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Aunque no sé si el general te permitirá entrar con eso dentro de la ciudad.

      Leethel dice en adurn: Me llevaría mucho tiempo y energías traerla con vida.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Tú sabrás…

      Leethel dice en adurn: Pues me pondré en camino cuanto antes.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Recuerda si es demasiado peligroso no expongas tu vida, me vales más vivo y con información que siendo la cena de la criatura.

      Leethel dice en adurn: Bueno, podré acercarme lo suficiente e investigarla antes de saber si puedo enfrentarla.

      Ghagkrik mira con cara dudosa a Leethel.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Tú serás conocedor de tus habilidades…

      Leethel sonríe ocultando sus artes.
      Leethel dice en adurn: Que así sea.
      Leethel dice en adurn: Pronto tendrás la información que necesitas.

      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Perfecto.
      Ghagkrik dice con una voz sobrenatural: Cuando vuelvas y veamos lo que tenemos obtendrás tu recompensa.

      Leethel murmurando para sí mismo: recompensa…
      Leethel pone un rostro de felicidad.
      Leethel se marcha del lugar después de recoger sus pertenencias.

      Ghagkrik se da la vuelta y comienza a limpiar el polvo de un antiguo jarrón esperando a un nuevo ‘cliente’.

    • Vyrleth
      Participante
      Número de entradas: 50

      Muerte a la araña.

      Después de pasar por el herbolario y la tienda de Elrich en Anduar, Leethel dispuso su marcha hacia el bosque de Eloras. Un corto y tranquilo paseo de pocas horas le separaban de llegar al mencionado bosque en busca de aquella maldita araña.

      Muchas incógnitas le perturbaban la tranquilidad del paseo. ¿Será tan fuerte y descomunal como me dijo Ghagkrik? ¿Seré capaz de convencerla para que se marche? …

      Por otra parte esperaba impaciente que su fiel pantera, llegase y le diese la tan ansiada información que estaba esperando. La mandó de avanzadilla a espiar a la susodicha sin que levantase ninguna sospecha de esta.

      Y allí la pudo encontrar, justo al pie de las colinas de Ostigurth, y tras apartarse del camino esta le dio sus peores presagios. Amigo Leethel, seré breve, estaban en lo cierto, esa maldita araña tiene un tamaño jamás visto, y una ferocidad inusual, mata por placer, no por alimentarse. Mora en la parte mas noroeste del bosque, y la rodean varios cientos de arboles cubiertos por una telaraña perfectamente tejida. No dudes en volver a llamarme, estaré cerca para cuando me necesites.

      Un halo helado rodeó la figura de Leethel, que paralizado y sin poder articular palabra, pasaban por su cabeza miles de ideas diferentes, pero nunca la de abandonar la misión.

      Después de sacudirse la cabeza y recobrar el aliento, respiró profundamente y pensó: más me vale que la recompensa merezca la pena… Y retomó su camino, que casi llegaba a su fin estando realmente cerca de Eloras.

      Descendía el camino hacia el valle cuando ya podía atisbar el imponente roble, ciudad habitada por halflings. Llamaba la atención la falta de transito de gente, recordaba cuando años atrás, en su última visita, cuando aquellos caminos estaban lleno de comerciantes y mercaderes. Nada, no se cruzó a nadie.

      La tarde avanzaba casi dando entrada a la oscura noche, y Leethel se dispuso a trepar a un frondoso árbol y acomodarse en su copa. Sería una locura cruzarme con la araña bajo la tenue luz de la luna, pensaba el semi-elfo. Haré noche aquí recobrare fuerzas, y mañana, cuando el sol de comienzo a un nuevo día partiré en su busca.

      Sobresaltado a altas horas de la madrugada, se pudo a clamar y pedir bendiciones a Ralder, para que le diera fuerza y valor para enfrentar la ardua tarea que tenia por delante. A su llamada acudió su fiel e inseparable amigo, un descomunal oso que encantado daría su vida por Leethel. Tras terminar los rezos y las peticiones a Ralder, el semi-elfo y el oso dispusieron la búsqueda de la araña.

      Con los primeros rayos de sol deslumbrantes por el horizonte, dejaba entre ver un manto de telarañas, humedecidos por el relente de la noche. Señal inequívoca que se adentraban a la morada de aquella bestia.

      Se adentraban con cautela por aquel tenebroso camino repleto de telarañas cuando un estruendoso sonido perturbaba aquel silencio. Y al girarse hacia el sonido el semi-elfo podía ver como caía con violencia un cuerpo malherido que reconocía como su pantera. Acto seguido, y en un abrir y cerrar de ojos, una gigantesca sombra se abalanzaba sobre el. Sí era la araña, atacando con fiereza al grupo que se adentraba en su morada.

      Tras un largo y sangriento combate, y sin saber muy bien como, Leethel y sus moribundos amigos salieron victoriosos, después de decapitar a la bestia, extenuados, tornaron el camino de vuelta.

Mostrando 4 respuestas a los debates
  • Debes estar registrado para responder a este debate.